Durante todas las entradas anteriores de este blog he intentado informar sobre todas las nuevas tecnologías que van surgiendo para personas con alguna discapacidad y también he dejado mi opinión acerca del precio tan elevado de estas siendo tan necesarias para que las personas discapacitadas logren una vida autónoma.
Trasteando por internet me tope con un libro interesante llamado Tecnología de las comunicaciones para personas con discapacidad intelectual escrito por Maria Puy Arrastia Lana.
En referencia al uso del teléfono móvil, un pequeño aparato que ya es común en todos nosotros, solo un 73% de personas con discapacidad lo usan por razones de comunicación y seguridad. Parece un porcentaje alto pero no creo que sea así. Este aparato tan importante en nuestras vidas, es un 27% las personas con discapacidad que no lo usan, pero lo mas amargo es saber los motivos. Según la encuesta los motivos son las pantallas pequeñas, las teclas muy juntas y con teclas minúsculas, un exceso de funciones que hace difícil su acceso y me atrevo a añadir la dificultad que tienen muchos de ellos, la mayoría los más adultos que carecen por completo de lecto-escritura por lo que resulta demasiado difícil comprender las funciones de un móvil estándar con este añadido. Es cierto que en la actualidad existen varios modelos táctiles, con pantallas gigantes, y para los que el problema de la lecto-escritura queda reducido al poder añadir fotos e iconos a cada función o número o incluso programas parlantes. Pero siempre volvemos al problema de siempre: su gran coste el cual no todos ellos se lo pueden permitir.
Otra gran tecnología usada por todo en nuestra vida cotidiana es el uso del ordenador e internet que en la actualidad se ha convertido necesario en nuestra vida cotidiana. Sin embargo en las personas con discapacidad intelectual es usado solo por un 28% de ellos de forma frecuente, siendo igual o más importante para ellos gracias a la cantidad de aplicaciones gratuitas que pueden usar. Las razones de su uso son el ocio y la comunicación quedando en un segundo plano el ámbito del trabajo.
¿Y porqué esta herramienta no es más usada? María Puy nos cuenta que tristemente es por la falta de formación y la cantidad de teclas en un ordenador estándar que dificulta el aprendizaje. Respecto a internet, existe demasiada información, publicidad descontrolada y paginas no accesibles a las personas con dificultades de lectura y escritura.
María también nos enumera las características que deberían tener un ordenador que facilitara el uso a estas personas como son el uso de pictogramas para las teclas de tareas, lenguajes adaptados o teclados más amplios. Esto nos lleva al problema antes dicho: Todas estas adaptaciones tienen un coste poco accesible para los discapacitados.
Finalmente y como conclusión creo que las TIC son realmente útiles para todos nosotros y dependemos de ellas en la vida diaria. Cada día se crean y renuevan tecnologías para hacernos más fácil la nuestra pero no la de las personas con alguna discapacidad intelectual. Es cierto que con el tiempo se han creado una infinidad de aplicaciones y ayudas para ellos, pero la poca información que tienen sobre ellas hace que queden inútiles. Además creo que se crean muchas tecnologías para ciertas discapacidades mientras que otras quedan en un segundo plano.
Todo funciona paso a paso, y mientras se da el siguiente paso, somos nosotros los que podemos ayudar a estas personas cuando colgamos información en internet haciéndola entendible para todos, o creando una página web con iconos que entiendan a donde pueden llegar. Diseñar un mundo para todos sin olvidarnos de unos pocos.
Os dejo aquí el link del libro